Llegó a Sevilla el Boss y derrochó arte con un espectáculo cargado de buena música y simpatía. Aunque el público estuvo entregado desde el minuto uno, su sencillez y cercanía hizo que pasáramos una noche inolvidable. En un momento del concierto subió a un niño al escenario y se aseguró un seguidor más para muchos años.
Lo de la E Street Band no tiene nombre. Un grupo de músicos veteranos que sólo con verlos impresionan, no te digo escucharlos...
El saxofonista Carence Clemons «Big Man» se escondió debajo de su sombrero aportando misterio y elegancia al evento.
Junto al de Virginia, Soozie Tyrell, una violinista con cara de institutriz británica; Nils Lofgren, guitarrista de los Crazy Horses y los Grin, rock puro; Max Weinberg a la batería, ritmo a pesar de sus dolores de espalda...
Y nuestro querido Silvio Dante,
o «Little» Steve Van Zandt...
Un concierto inolvidable, a pesar de que una hora antes del comienzo los termómetros no bajaran de 40...
